viernes, 3 de diciembre de 2010

MEGAMENTE. DETRAS DE CAMARAS. Por Erica Encarnación

Megamente (Megamind) es el supervillano más brillante que el mundo ha conocido, pero también es el menos exitoso. Por más que se esmera, sus megaplanes siempre se salen de curso y la damisela que él se esfuerza en secuestrar finalmente es rescatada por su némesis Metroman.


Los estudios Dreamworks Animation nos traen una nueva producción, esta vez dedicada a la eterna batalla entre el bien y el mal aunque en este caso sería más bien, entre el mal y el bien.

Megamente es un ser de otro planeta que es enviado por sus padres a la tierra, antes  que su lugar de origen se destruya completamente. Lo mismo sucede con Metroman pero como las cosas a veces se salen de su verdadero curso, mientras el pequeño superhéroe cae en una hermosa mansión el bebe Megamente cae en una prisión.


A lo largo de los años, el villano azul trata de conquistar Metro City pero ninguno de sus planes dan resultado, pese a que es una ser muy inteligente. Y cuando finalmente logra desaparecer a su archienemigo Metroman, un nuevo villano amenaza la cuidad, surgiendo la gran interrogante ¿el supervillano con la mente mas brillante del mundo, será capaz de salvar a la cuidad? 

Los animadores de Megamente tuvieron que emplear mucho ingenio y creatividad  para lograr la forma y apariencia no solo del supervillano si no también del singular elenco que lo acompaña, que a pesar de ser humanos también encontramos a seres extraños como Servil, el ayudante y asistente personal de Megamente, cuya labor primordial es limpiar y arreglar todo, después que el malvado genio falla en el intento por concretar algunos de  sus alocados planes.

En esta ocasión el reto para los animadores de Dreamworks fue construir toda la cuidad de Metrocity, que debido a los desplazamientos aéreos de los personajes resultó necesario crear la metrópoli completa con casas, calles y edificios.


Pero este hecho, también los llevo a asumir otro reto: poblarla con seres humanos. Para lograrlo los animadores de Dreamworks crearon varios cuerpos humanos a los que les colocaron rostros y cabellos diferentes, ubicándolos en diversos lugares. Y para otorgarles algo de realismo, los animadores se valieron de ellos mismos como modelos a seguir, es decir, emplearon videos que grabaron previamente, para copiar sus gestos y dárselos a los personajes animados.

Megamente es un criminal delirante, egoísta y extremandamente inepto, que cada plan que tiene lo transforma en un colosal fracaso. Pero cuando las cosas de verdad se pongan color hormiga, el genio malvado tendrá que probar cuan brillante es su mente en realidad. No se pierda es simpática comedia animada que además llega en tercera dimensión. 

1 comentario:

Anónimo dijo...

Está genial ésta película. La recomiendo mucho :D

PD: Servil es lo máximo!