Su éxito entre los niños, púberes y los no tan adolescentes es abrumador. En vista de que mañana se estrena por estos lares la tercera entrega de la saga de High School Musical, la primera en el cine, y por el amor que le tengo a mi hija Fabiana (porque este tipo de películas musicales no tenía pensado comentar ni usar para este blog), decidí postear esta nota que hace una semana realicé para Cinescape...y es que este contraataque en series de televisión y musical del canal televisivo de Disney es realmente increíble...ahí les va:
Son tres productos que se prolongan por todos los formatos posibles. Pudorosos y puritanos, son adolescentes, pero tienen un filón comercial que ya quisieran los consagrados, y quien lo inició todo fue High School Musical, la película para televisión de estudiantes/cantantes estrenada en Disney Channel en el 2006. Una trama positiva, canciones pegajosas, energía juvenil y un gran mercadeo la han hecho un exitazo, llegando a calificarse como el Amor Sin Barreras o el Grease juvenil del siglo 21. La primera entrega fue vista por 200 millones de personas en un centenar de países, obtuvo dos Emmy y su banda sonora se ubicó en el número 1. Con la segunda se repitió el fenómeno: su estreno congregó a más de 17 millones de personas y se convirtió en lo más visto de la historia de la televisión por cable; y ahora tenemos la tercera entrega, pero esta vez en versión al cine que de hecho será otro éxito.
Y llegó la serie Hannah Montana, con la quinceañera Miley Cyrus, quien ha demostrado ser el nuevo ídolo de la niñez y la juventud a nivel mundial. A la serie, que ha tenido 160 millones de espectadores en los últimos dos años, le siguió una gira en la que se agotaron todas las entradas, el taquillazo cinematográfico en 3D Hannah Montana/Miley Cyrus: Best of Both Worlds Concert Tour, y ha vendido más de ocho millones de copias de sus discos. Una auténtica mina de oro…
Con letras limpias e imagen sana, su último producto es Camp Rock, una película para televisión llena de música pegajosa que vuelve loca a la audiencia infantil. Protagonizada por Demi Lovato, esta actriz, cantante y compositora de 16 años es llamada a ser la próxima gran estrella de la cadena quien con el estreno de su álbum, "Don't Forget," puede ser la siguiente Miley Cyrus; pero sobre todo, los Jonas Brothers, tres hermanos de entre 15 y 20 años a los que se les ve en la serie “Living the Dream”. Su álbum debut, lanzado en el 2007, llegó a platino y la mayoría de sus temas se mantienen en el Top 40, tocan en estadios llenos y están preparando la versión en 3D de su gira para el 2009.
¿Cuál es la fórmula del éxito? Mas allá de la música pegadiza, novedosas coreografías y divertidas historias, la corrección es una de sus señas de identidad, su puritanismo llega a límites que sorprenden: los Jonas Brothers y Demi Lovato hacen campaña de su castidad hasta el matrimonio con anillos que no se quitan de sus manos, llegando al extremo que los protagonistas ni siquiera se besan, como pasó en High School Musical y se repite en Camp Rock. ¿Mojigatería o una manera de crear valores en los adolescentes?
Esta es la constante de los productos de Disney Channel, donde vemos a jóvenes aplicados y respetuosos, que confían en si mismos, componen y cantan letras limpias y persiguen sus sueños junto a su familia, abasteciendo ejércitos de fanáticos con edades entre los 6 y los 14 años. La factoría ha encontrado la fórmula para llenar sus arcas…y no piensa soltarla.
Y llegó la serie Hannah Montana, con la quinceañera Miley Cyrus, quien ha demostrado ser el nuevo ídolo de la niñez y la juventud a nivel mundial. A la serie, que ha tenido 160 millones de espectadores en los últimos dos años, le siguió una gira en la que se agotaron todas las entradas, el taquillazo cinematográfico en 3D Hannah Montana/Miley Cyrus: Best of Both Worlds Concert Tour, y ha vendido más de ocho millones de copias de sus discos. Una auténtica mina de oro…
Con letras limpias e imagen sana, su último producto es Camp Rock, una película para televisión llena de música pegajosa que vuelve loca a la audiencia infantil. Protagonizada por Demi Lovato, esta actriz, cantante y compositora de 16 años es llamada a ser la próxima gran estrella de la cadena quien con el estreno de su álbum, "Don't Forget," puede ser la siguiente Miley Cyrus; pero sobre todo, los Jonas Brothers, tres hermanos de entre 15 y 20 años a los que se les ve en la serie “Living the Dream”. Su álbum debut, lanzado en el 2007, llegó a platino y la mayoría de sus temas se mantienen en el Top 40, tocan en estadios llenos y están preparando la versión en 3D de su gira para el 2009.
¿Cuál es la fórmula del éxito? Mas allá de la música pegadiza, novedosas coreografías y divertidas historias, la corrección es una de sus señas de identidad, su puritanismo llega a límites que sorprenden: los Jonas Brothers y Demi Lovato hacen campaña de su castidad hasta el matrimonio con anillos que no se quitan de sus manos, llegando al extremo que los protagonistas ni siquiera se besan, como pasó en High School Musical y se repite en Camp Rock. ¿Mojigatería o una manera de crear valores en los adolescentes?
Esta es la constante de los productos de Disney Channel, donde vemos a jóvenes aplicados y respetuosos, que confían en si mismos, componen y cantan letras limpias y persiguen sus sueños junto a su familia, abasteciendo ejércitos de fanáticos con edades entre los 6 y los 14 años. La factoría ha encontrado la fórmula para llenar sus arcas…y no piensa soltarla.
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